Corría el año de 1564 cuando nace Galileo Galei (un nombre cojonudo para un grupo de rock o una orquesta, ¡no me lo negareis!) Sus padres eran un noble venido a menos y la hija de un próspero mercader. No queremos ponernos marujonas peeero se decía en los mentideros de Pisa que el matrimonio había sido por conveniencia y ¡se llevaban fatal! Aún así, para acallar rumores y eso tuvieron 7 hijos de los cuales Galileo era el mayor.
Estudió en un colegio de curas y llegada la hora de ir a la universidad el chaval no sabía por que decidirse, ¡que todo se le daba bien al jodío! ¡Hay que ver cómo eran los hombres del renacimiento!: que si escritura, que si poesía, que si inventar aparatejos… Y los padres le presionaron para que estudiase medicina, que eso de tener un hijo médico siempre ha dao mucho caché, ¡que te haces la reina de la peluquería! Con un poco de suerte te adelanta en las listas de la seguridad social y todo… El caso es que se matricula en la carrera y empieza en la universidad, pero… ¡era un follonero de cuidado! El típico que siempre la lía en clase, ¡venga a hacer preguntas chorras! y meterse en jaleo, que le llamaban Galileo “el peleón” y le acabaron expulsando de de la facultad:
-El de la última fila al despacho del director por liante, ¡que te vamos a empapelar pero bien!
Y Galileo se piró a Florencia y se buscó a un profesor particular, Ostilio Ricci, que se dio cuenta que a él lo que le molaban eran las matemáticas y quería profundizar en el tema… Y coger a un alumno de estos es un peligro, que en seguida te superan y quedas fatal, que en su tiempo libre se dedicaba a lanzar bolas por un plano inclinado y descubrió que los objetos caían a una velocidad constantemente acelerada (lo de la gravedad no lo intuyó, porque el que tuvo la suerte del manzanazo en la cabeza fue Newton), un domingo en misa se quedó abstraído mirando como oscilaba la lámpara y describió el principio del movimiento pendular, ¡un no parar de teorías! Tan bueno era que en la facultad de Pisa le dan una cátedra. Me lo imagino en el claustro de profesores:
-Ejem, ejem, ejem… que creo que alguien de aquí había expulsado a un catedrático…
Pero lo que realmente cambió la vida de Galileo fue un paquete que vino de Holanda (¡qué cosa llegan de Holanda, eh!) y traía una especie de prismáticos de 3 aumentos, ¡le flipó! Que todos nos hemos pasado horas tontas con una lupa cutre mirando las motitas de polvo de las repisas, ¡pues imaginaos él con el telescopio! Lo primero que hizo fue popularizarlo entre los mercaderes y marinos de Italia, y la pasta gansa que ganó la invirtió en I+D y a los poco meses tenía un peazo telescopio de 30 aumentos. Me imagino que primero espiaría a la vecinita y esas cosas de tíos pero luego, como no había ni luz eléctrica ni ná, pues por las noches enfocó el firmamento y… ¡¡ahí sí que flipó pero bien!! Que vio que la luna tenía relieve, descubrió las lunas de Júpiter y que Saturno tiente un anillo (debe ser de compromiso lo compró para su amor) y que todo eso giraba alrededor del sol (la luna tierra y la luna rotan, giran y nunca se tocan al igula que él y yoooo)!! Y empezó a razonar:
-Osea que todo gira alrededor del sol y el sol gira alrededor de la Tierra… Raro, raro, raro… A ver si va a ser la tierra la que gira y la teoría geocéntrica va a ser un poco egocéntrica…
Y empezó a contar en los bares sus descubrimientos, pero a los Dominicos eso les mosqueaba bastante… ¿Qué tontería era esa de que la Tierra giraba? ¿Estamos locos o somos herejes? Y se chivaron al Papa. Pero Galileo con lo de ser representante de telescopios se había hecho colega de los papas así que solo le dieron un aviso:
-Galieo, ¡no te pases, tío! Que lo que cuentas va en contra de la Biblia, ¡te estás quemando mazo con la iglesia! deja el tema y todos colegas, ¿ok?
Pero bueno era Galileo para cumplir órdenes y, lejos de dejar de investigar, publica un libro, ¡con un par! Y no le da un título de esos rebuscados para que ni Dios se atreva a leerlo, no, no, le pone un título rompedor, ¡un título de Best Seller!: EL MENSAJERO SIDERAL (¡¡¡tantachán!!!)
Y ahí los que se picaron fueron los Jesuitas ¡Que eran los intelectuales de la iglesia y en ningún sitio de la Biblia decían que la tierra girase! Se volvieron a chivar al Papa y en 1633 le juzgaron por Hereje… Pero como ya hemos dicho que Galileo caía bien a la cúpula eclesiástica decidieron que le perdonaban la vida y pasaban con una sanción económica y unos puntos del carnet si firmaba que era todo mentira, que en realidad él no había visto girar na de na, que había sido una ilusión debido al efecto helicóptero un día que le había sentado mal el vino… que se lo había inventado todo para estar en el candelero y vender libros... Y Galileo, que morir tampoco quería, ahí mordiéndose la lengua y de mu mala leche se retractó por escrito y al salir del juicio ya no pudo reprimirse y dijo lo de:
- Eppur si muove (y sin embargo, se mueve)
Que es una manera de decir: gira el mundo, gira, en el espacio infinito con las penas y alegrías de la gente como yooooooo, el muuuuuuundo (si la vida de Galileo fuera un musical saldría a la calle cantando eso después del juicio fijo, fijo…)
Se pasó el resto de su vida retirado en Florencia y se murió a los 1642 a los 68 años de edad.
Luego ya, en 1979 estaba el Papa Juan Pablo II ordenando un poquito los papeles del vaticano y esto que te quedas distraído leyendo cosicas antiguas y ve el juicio de Galileo y dice:
-¡Carambita! Con este nos hemos pasado un poquito, ¡que tenía razón! Hay que subsanar este error histórico…
-¿Le hacemos santo como a todos, Su Santidad?
-Tampoco te pases, que he leído yo que vivía en pecado con María Gamba y tuvo hijos sin casarse ni na… ¡una carta de perdón público y listo! Que vean que somos bastante guays y cuando nos equivocamos pues subsanamos el error… ¡que eso nos hace supercercanos a la juventud!
Se pusieron con la carta y 13 años más tarde terminaron de redactarla, que no le gusta a la iglesia hacer las cosas con prisas, así el 31 de octubre del 1992 se le pide el perdón oficial y público al gran Galileo Galilei, padre de la fisica y la astronomia moderna.