miércoles, 6 de noviembre de 2013

ATAHUALPA





Atahualpa, nombre molón hasta que sabes que en quechua significa Gallo, (probablemente por eso después llevase la cresta esa de plumas que se ve en el retrato) fue el último emperador Incaico. Nació allá por el 1500 en algún lugar del actual Perú, Quito o Cuzco o por ahí… Pertenecía a la dinastía Hanna Cuzco y era uno de los 200 hijos de Huayna Cápac. Si, si, 200, que esto lo de los métodos anticonceptivos no lo controlaban en el nuevo mundo, y se ve que Huayna donde ponía el ojo, ponía la bala… Lo que no está muy claro es quien era la madre, porque claro, con tanta prole vas al registro civil y te lías, que debía tener unha media de 3 mujeres dando a luz al mes..
Dentro de toda la descendencia era uno de los 3 favoritos: él,  Ninan Cuyuchi, que era el heredero, y Huáscar. De hecho había ido con su padre a una guerra en el norte y todo, que eso de ir juntos a la guerra une mogollón, y se había quedado cogobernado Quito. En principio Atatahualpa no estaba destinado al trono, pero cosas de la vida, su padre y su hermano el heredero murieron víctimas de una de esas enfermedades modernas que habían llevado los conquistadores españoles (viruela o así) y que eran muy mainstream en la época. Tras el triste suceso quedó un vacío de poder que estaban destinados a llenar o él o Huáscar y era visto  que se iba a liar parda en la lucha por el trono porque no eran muy de compartir.
Mientras Atuhualpa estaba en Quito, apoyado por el ejército del norte, Huáscar estaba en Cuzco, que era la ciudad más importante, y llegado un momento se envalentonó e hizo un Napoleón, lo que viene siendo auto coronarse emperador, Inca, en este caso, y cuando se enteró su hermano pilló un rebote tremendísimo, justo estaba pensando en bloquearlo del Whatsapp cuando le llega un mensaje de Huáscar:
“Hey, venga, ya ves que me lo he pedido primer, no te piques, vente a Cuzco y nos vamos a tomar unas copichuelas, anda…”
Pera Atahualpa no era tonto y su hermano le parecía un falso de cuidado, “este llego allí y me nada matar fijo” así que no se fió un pelo y en lugar de ir él personalmente mandó unos emisarios, con unos regalitos, como si fuese de buen rollo… ¡Y como se puso Huáscar! que le pareció fatal y super hipócrita esa reacción, que no se atreviese a ir y encima anduviese mandándole cositas como si fuesen colegas.  Así que del rebote que se pilló torturó un poquito a los emisarios y los mandó de vuelta con unos regalos mierder para fastidiar a su hermano… ¡y vaya si le fastidio! Que en cuando vio el panorama se picó y ¡empezó una guerra civil!
Y venga batalla va batalla viene, hasta que capturan a Huáscar, le mandan  a las mazmorras, y Atahualpa se declara Inca.
Estaba casi de resaca de la celebración cuando le dicen que están los españoles cerca, en un sitio que se llama Cajamarca (que parece más un equipo de basket que una ciudad) y va el tío, con todo lo desconfiado que había sido con su propio hermano, y dice:
-Ah, ¡ pos organizarlo todo que quiero ir a conocerles!
A veeeeer, chiquillo, unos pavos que vienen de ni sabes dónde, que han ido expoliando lo que les han dejado y contagiando unas enfermedades muy chungas ¡y vas a comer con ellos! ¿En serio, Atahualpa? ¡¡Si es que eso es andarlas buscando!!
Total que llega todo ilusionado al banquete, pero ve que el lugar del líder español llega un fraile con un intérprete, le fastidia un poquito ese trato, que es rebajarle un poco, pero de todas maneras, con la típica educación de los latinoamericanos, le presenta los platos típicos, todo muy currado. ¿Y que hace Fray Vicente de Velarde? Pues lo tira todo al suelo pensando que fijo que estaba envenado. Los españoles si que eran desconfiados y no se acababa de creer el buen rollismo, si es que piensa el ladrón…
Y después de eso ¿sabéis las típicas películas en las que alguién empieza tirando una bola de pan y se acaba liando parda? Pues esta fue la primera vez en la historia que se produjo esa escena. Lo que pasa es que se fueron calentando y acabaron pelando en plan mal, ¡eh! Con muertos y todo. De hecho un conquistador casi mata al propio Atahualpa, si no es por Francisco Pizarro que lo frena, y se cortó el en una mano y todo para evitarlo. Pero no le parecía plan de matar a un gobernador sin hablar con él y preguntarle donde está el oro antes y tal y cual…
Total que nuestro prota acaba en prisión, y  ¡que bajón! Estuvo tope de depre,  sin mujer, sin dinero y sin reino… ¡normal! Lloraba mogollón y casi no comía… Pero aún así era tan aplicado que en menos de un mes aprendió a escribir y a hablar español. Y Francisco Pizarro, que a veces iba al calabozo  a hablar con él, se acabó haciendo mazo colega suyo. Incluso le dejaba medio dirigir el imperio desde el encierro... Que por cierto una de las medidas que tomó fue que matara a Huáscar, que pensaba "a ver si con la tontería me muero, acaba mi hermano recuperando el trono y no me vale de las 13 batallas de la guerra civil”
En una de estas conversaciones con los españoles llegan a una acuerdo para su liberación: llenar una habitación a tope de oro y dos de plata ¡hay que ver que obsesión de los conquistadores con los metales preciosos! Atahualpa cumple su parte  (que sigo pensando ¿Cómo confías tanto en estos pavos y tan poco en tu hermano?) y cuando piensa que lo van a liberar llega el fraile aquel de la comida:
-A ver… si no es por no liberarte, es que: has matado a tu hermano, adoras ídolos chungos, luego está el tema de la poligamia… ¡es que las tienes  todas pa que te condenemos a muerte, eh! Si esto lo hacemos aquí, pero en nuestro país también, no te creas que es una excepción,  no sé si te han comentado algo de la inquisición…
Y el pobre ya se da por vencido.
-Embalsamarme por lo menos después, que me lo pone de condición mi Dios pa despertar en la vida eterna…
-Es que no sabemos embalsamar muy… ¡pero espérate que tengo una ideaca!  ¡Te bautizamos, te arrepientes y vas pa nuestro cielo que allí cabemos todos!
Y así fue, Francisco le pusieron de nombre al pobre Inca.
El 25 de julio de 1533, (día del apostol, que cosas) le ejecutan y  le entierran en la iglesia de Cajamarca, de donde en breve su cadáver desaparece, supongo que porque a sus partidarios ya le estaría pareciendo mucha coña la cosa y se lo llevaron para darle un entierro digno con sus rituales y sus cositas.
Después de  su muerte llegó la anarquía al imprerio sus partidarios se revelaron contra los conquistadores y los de su hermano va y se alián con los españoles (en serios... ¿tan pinta de buenos tenían que no desconfiaban ni un poquito de sus intenciones?) una cosa muy loca peeeero… ¡ya es otra historia!

miércoles, 2 de octubre de 2013

ARS AMANDI: EL PRIMER MANUAL DE SEDUCCIÓN


 Ovidio era un niño de bien que quería ser poeta latino, pero latino de romanos, no en plan Carlos Baute o Shakira. Desde la más tierna infancia, se dedicó a las letras, a divagar sobre el por qué de las cosas, sobre la belleza del mundo e idas de ollas similares, para plasmarlo en versos que pasaban por todos sus compañeros de colegio. El tío lo hacía bien, y llegó incluso a vender unos cuantos poemas de amor para colegas que querían conquistar a tal o cual chicha mona. Pero el delegado de clase, que se llamaba Augusto, le tenía mucha tirria, porque con tanta labia latina, tanto romanticismo y tanta gaita se ligaba siempre a la menda más buenorra. Tuvo Ovidio la malísima suerte de que Augusto era envidioso pero no tonto ni pobre, y llegó a emperador. Y en llegando a emperador, lo desterró... "por fanfarrón y porque me dá la gana, que para eso soy emperador"
Acabó nuestro poeta, más tarde cantautor, en Tomis, lo que hoy es Constanza, en el Mar Negro... como bien escribía el mismo "en este negro mar, como negro es mi sino, desventurado soy en este camino, aquí no hay coberturas ni un comino... ah, suspiro" Allí su obra se hizo por tanto más nostálgica, pero mientras vivió en la alocada Roma, que cada vez estaba más llena de extrañas tribus urbanas, dedicó buena parte de su tiempo a escribir el primer tratado de seducción: Ars Amandi, que publicó por capítulos en su blog de internet. 
Tuvo tantísimo éxito que incluso sacó un libro electrónico, ¡lo vendía a 30 euros el ejemplar, el pavo aprovechao! pero como debía tener salida y funcionaba, le rentaba el negocio. Dentro del Ars Amandi Ovidio compiló una serie de consejos para el coqueteo, unos más ingénuos, otros atrevidos de cojones para la Roma del momento. 2000 años hace que se escribió este libraco, arte pura mezclada con psiquiatía de la de calidad, y ¡¡AÚN HOY LO PODEMOS USAR!! yo de hecho siempre llevo una copia en mi smartphone, para utilizarla siempre que me sea necesario. 
Algunas sugerancias de Ovidio eran "Promete, promete siempre y mucho que prometer no arruina a nadie. Ten en cuenta que si regalas algo a tu amante antes de haberla poseído, es muy fácil que te quedes sin regalo y sin amante" Bien, Ovidio, ¡¡con un par!! Sí señor!! alguien con dos dedos de frente, hombre ya, ¡tanta tontería con el amor! Otras perlillas: "Quizás recibas una petición rogándote que ceses tu asedio, pero yo te aseguro que ella estará temblando de que obedezcas su ruego. Es el momento de redoblar tus atenciones y súplicas y pronto caerá en tus brazos". .... .... ¿? .... .... ¿? Bueno, aquí te pasaste chico. Darle alas a los pelmazos ya no me parece una buena idea. Que a ver, que esto ya veo que viene de muy lejos en el tiempo... si una chica dice que NO es que NO y punto pelota... ese mito del sí dentro del no me rebienta la moral. Bueno, sigamos profundizando en el Ars: "Mientras seas libre aprovecha el instante idóneo para decir a tu elegida: sólo me gustas tú. Las mujeres no caen del cielo. Tú mismo la tienes que buscar. Sé obsequioso y amable. Si el vestido le arrastra, recógeselo al instante. Así podrás verle las piernas sin ofender su pudor. Si ha caído polvo sobre su traje, sacúdelo suavemente con los dedos y si no ha caído, fíngelo y haz como si lo sacudieras. Es una buena ocasión para tentar las carnes tibias y hermosas de su cuerpo" . ¡¡OLE, OLE Y OLE!! O mejor, como dirían en mi tierra, ¡TÓCALLE O CARALLO, TI SÍ QUE MOLAS, COMPAÑEIRO! Sigamos: "Ve siempre aseado, los cabellos bien arreglados, que no caigan en mechones ni la barba que erice el rostro. No lleves las uñas largas ni sucias y que asomen los pelos por las ventanas de la nariz. Y es muy importante que tu boca tenga buen aliento" jajaja, es que me parto. Un crack, el tío este, los de colgate aún le están pagando comisión. Y la guinda del pastel: "Para seducir a una mujer ruégale. Pero si ves que este método no funciona, busca otros amores. El gran secreto de vivir es saber adaptarse (lo pilláis?), por ello con cada (con CADA, no con una, con CADA, qué tío) mujer debes usar una técnica diferente. Si te quieres pasar de listo con las ingenuas y de audaz con las gazmoñas (... ... ¿¿Gaz quéeee???) al final sólo conseguirás que ninguna se fíe de ti"  
HE DICHO. QUÉ ARTISTA. QUÉ GENIO. OVIDIO, DIRECTOR DE TRONISTAS.

lunes, 23 de septiembre de 2013

CRISTÓBAL COLÓN (parte II)




Total, que despues de todas las peripecias (aquí) con los permisos reales y un vale para un barco y provisiones Colón le dijo  a la Bea que se iba a por tabaco y se piró pal puerto de Palos. Allí colgó un papel en la puerta de la iglesia, que era el Info Jobs de la época poniendo que se buscaban hombres para una aventura que lo iba a petar, ¡ir a Japón por el otro lado! Y los de Palos se descojonaban leyéndolo a la salida de la misa de doce. ¿Pero quién es el pirado este? Que aunque estemos en Huelva ¡esto es Palos, no es Lepe! ¡Que nadie va a picar en la chorrada esa de que la tierra es redonda! Y ni un currículo de marinero aventurero le mandaron. Ya estaba el pensando en utilizar el permiso que le habían dado los reyes católicos para  reclutar presos, que así de entrada no le molaba mucho, ¡que hay cada uno en las cárceles! Pero mejor que nada… En esas cavilaciones andaba cuando se hizo colega de los Hermanos Pinzones (Martín, Alonso y Francisco),  les contó su proyecto y a estos les pareció la monda lironda. Caerle bien a los Pinzones era como caerle bien a un tuitstart y que te haga RT a lo loco, a la peña de repente le empieza a interesar  lo que dices, y consiguió los 90 followers necesarios para partir a la aventura.
Los Pinzones, a demás de hacerle RT se embarcaron con él y aportaron dos carabelas: Martín, La Pinta y Alonso, La Niña. Francisco, el pobre, no tenía y fue en la Pinta de acoplado. Junto con la Santa María (que no era carabela, sino nao, que molaba más porque había sido construida en Galicia) el 3 de agosto de 1492 partieron del puerto de Palos. Tuvieron que estar en Canarias, en la Gomera, hasta el 9 de septiembre, porque La Pinta no había pasao la ITV por el timón, y tuvieron que arreglarlo y ya de paso le pusieron unas velas nuevas, cuadradas, que pillaban el viento de un bien que flipas, ¡la nave más rápida de la expedición!
Y así por fin partieron a la nueva ruta.
Al principio era todo chupi guay, ahí contando anécdotas y cantando canciones marineras, pero cuando llevaban un mes navega que te navega, sin una puta isla pa parar a comprar el Marca y Colón repitiendo por enésima vez su naufragio en Portugal, pues los de la Santa María se amotinaron un poquito…  Y ya Colón le mandó un sms a Los Pinzones, que tenían mucho don de gentes, para que calmaran a peña… Fueron allí y soltaron un discurso tope de motivador de que ya estaban llegando, de que ya verían lo que molaba la peña asiática y lo bueno que estaba el sake…  Y los calmaron,  pero un par de diítas solo, que luego el cague se contagió al resto de las embarcaciones, que llevaban ya mucho trayecto sin ver tierra… y a ver si al final era cierta la primera impresión y el Colón estaba como un cencerro, que la culpa ya era de ellos por hacerles caso…
Con el ambiente así  de enrarecido los capitanes decidieron que si en un par de días no veían tierra pues giraban los barquitos ¡Y de vuelta pa Palos! Con tanta suerte, que en un par de días, 12 de Octubre, Rodrigo de Triana grita lo de ¡Tierra a la vista! Y pocas horas después llegaban a las Bahamas, que ya es puntería de cojones tener todo un continente esperando pa que choques e ir a dar a una isla.
Y ahí se bajaron en plan ¡muy bonito este lado de Las Indias, eh! Que llegamos siempre por el otro y fíjate que playacas había aquí, que aguas cálidas, que paradisiaco todo. Y claro, cuando le llegaron los nativos en bolas ya fue el flipe máximo: ¡y qué modas!
Pero ellos no habían ido allí a hacer turismo, sino negocios y lo tenían muy clarito, así que se pusieron el uniforme de los Scouts y… ¡venga a explorar! Que tiene mérito, llegar al Caribe virgen y ponerte a buscar especies en vez de quedar a mojitos en la playa… Pero nada, se pusieron en plan ¿Dónde está el Gran Kan? Que hemos venido aquí a hacer negocios, ¿y el oro? ¡Compro oro! ¡Compro oro! Que yo creo que  más de un marinero se colgó al cuello el cartelito pa ir dejando claras las intenciones… Y por primera vez que se escuchó en el Caribe lo de “me estás estresaaaaando”  ¡Normal!
Los navegantes españoles siguieron investigando la zona, buscando el esplendor asiático del que tanto se hablaba. Hasta que el 16 de enero de 1493 Colón decide regresar con la Pinta y la Niña, pues la Santa María había tenido ya un percance, digamos que ahora en vez de Nao era El Fuerte de Navidad de La Española,  donde quedaron 40 voluntarios controlando todo. Para que losReyes Católicos creyesen de que efectivamente había llegado a las indias, Colón se cogió los típicos souvenires: unos collares, unas piñas coladas, unos papagayos, unos indígenas… Ya, con lo de los indígenas se pasó un huevo, pero les vendió lo de la relaxing cup of café con leche in Plaza Mayor y los lió.
Total que vuelve a la vieja Europa, y mientras que la Niña llega a Portugal, la Pinta llega a Bayona, los primeros sitios donde cuentan toda la movida. ¡Bueeeeno, bueeeeeno! Hemos encontrado un sitio que os va a encantar, no queremos hacer spoilers pero ¡los gallegos vais a emigrar en masa!
Luego se lo cuenta también a los Reyes Católicos, que fascinados por la historia de lo chulo que era todo y que había oro a espuertas le preparan otra expedición a la que Colón lleva a su familia y  para que se presentan más marineros que pal casting de Gran Hermano. Con todo listo vuelve a América, digo al este de Asia (ejem, ejem)  con el objetivo de explorar un poquito, colonizar si veían que tal y llevar la fe católica a los pobladores.
Cuando llegan se llevan el primer chasco al ver que los descubridores que habían quedado en el Fuerte de Navidad habían sido asesinados (que menudo palo se debieron llevar también los indígenas que cuando pensaron que se había acabado el problema ven llegar una segunda expedición de los colgados de Compro Oro) El segundo era que seguían sin encontrar ni una maldita tienda de Los Chinos y bueno… joyerías con oro y diamantes ¡ni la primera!  Por no encontrar no encontrado ni continente, ¡que todo era islas, jopé! Por eso muchos ya se piraron al poco de llegar y volvieron a España para poner a Colón a caldo, que cuando volvió él tuvo que hacer la ostia de platós para lavar su imagen. La parte positiva es que los pueblos con los que iban tropezando pues eran facilillos de conquistar, las cosas como son… ¡nada que ver con expulsar a los moros de la península!  Colón emprende el viaje de vuelta en enero del 1494, después de haber fundado en La Española la primera ciudad, a la que le llamó La Isabela, por hacerle un poquito la pelota a la Reina, más que nada…
Estuvo dos años en España, y  todas las noticias que llegaban de las nuevas Tierras era que había islas e islas e islas (ninguna Japonesa, por cierto), pero ni rastro del continente asiático... Así que en el 1496 emprende un 3º viaje, empeñado en encontrar las costas de China fuere como fuese. Se pone a explorar y llega a la desembocadura del Orinoco, en las costas de la actual Venezuela, tocando por primera vez el Continente Americano.
-¡Ala! ¡El continente asiático! ¿Contentos ahora? ¡Venga a buscar el camino a Pekín!
Pero ahí a aparecieron los primeros listillos
-A ver, Cristóbal, en serio… ¡esto no Asia es, tío! Tú fíjate bien, ¿te parece chinesa esta peña morenita en taparrabos? ¡Busca una geisha, a ver si la encuentras!
Y a Colón ya todo este asunto le provocaba un estrés tan loco que, bueno, se empezó a poner violento con con todo quisque, le daba igual que fuesen indígenas o españoles de la madre patria...  Hasta tal punto que le llegaron quejas a los Reyes Católicos e enviaron a Francisco de Boadilla pa que fuese a quitarle todos los poderes (poderes políticos, eh, mágicos no tenía), lo encadenara y lo trajera de vuelta a España.
Ya no conseguiría recuperar sus privilegios, pero en reconocimiento a todo que había liado tampoco fue a la cárcel. Y como seguía erre que erre con que podía encontrar un camino que llevase a las civilizaciones asiáticas consiguió que le embarcasen en un cuarto viaje en el 1502. Con 51 años, un pureta de cuidado, vuelve con el objetivo de buscar un paso marítimo que le lleve a la costa de Asia. Llega, entre muchas vicisitudes a Panamá, y está a puntito de descubrir el océano Pacífico, pero se cansa antes y retorna…
Entre temporales, problemas de poder con los gobernadores españoles y problemas con un molusco hijoputa que se comía la madera de los barcos pasa los últimos meses en Jamaica hasta que en septiembre de 1504 consigue volver a embarcar rumbo a España para morir en Valladolid el 20 de mayo de 1506.
¡Y no se acaba aquí la historia, eh! Que el amigo viajó casi tanto en cadáver como en vivo: estuvo enterrado en Valladolid, Santo Domingo, la Habana, Cádiz, Sevilla… y claro, con tanto trasiego su reposo final es casi tan misterioso como su origen, que supuestamente está en la Giralda pero en Santo Domingo dicen que tienen una cajita donde pone claramente “Cristóbal Colón. Restos Mortales” Es que ¿a quién no se le han perdido unos huesos en una mudanza?


lunes, 16 de septiembre de 2013

CRISTÓBAL COLÓN (parte I)







Cristóbal Colón nació en 1451 en un lugar de cuyo nombre no es que no quiera acordarme, ¡es que no se sabe! Un misterio mayor que el Fátima: Los Italianos dicen que era de Génova, los portugueses que cantaba fados desde la más tierna infancia, los catalanes que había estado en la masía ¡hasta en Guadalajara decían le habían visto por allí en pañales! Cuando se le preguntaba a él personalmente, que este tema se le preguntó, él respondía  siempre con evasivas o contestando con otra pregunta: ¿Qué de donde soy o de donde vengo?, pues  ni de aquí ni allí, de donde se me trate bien, ciudadano del mundo. Siempre sin subir ni bajar… Y no es por nada, pero con esa actitud ¿que más pistas queréis? ¡Era gallego, filliños!
Cristóbal trabajaba de marino y, cosas que le pasan a los marinos, con 25 años sufrió un naufragio cerquita de Portugal, que menos mal que era cerquita porque tuvo que llegar nadando  a la costa del Algarve, que le faltaban las pegatinas de Plátanos de Canarias para parecer David Meca superando un reto. Una vez en suelo Luso decidió ir hasta Lisboa, que se ve que tenía allí parentela y colegas pa que le dejaran ropa seca. Como no hay mal que por bien no venga y el destino no da puntada sin hilo esta estancia en Portugal le sirvió para conocer a una chica de la High Society: Filipa Moniz, con la contrajo matrimonio, tuvo a su hijo Diego y vivió en Porto Santo y en Madeira, de donde, por cierto, su suegro había sido colonizador.
Se ve que tras el matrimonio Filipa ya no le dejaba irse de tascas medievales hasta las tantas, y al recogerse más temprano empezó a madrugar los domingos y aprovechaba el tiempo pa ver mapas y estudiar cartografía. Era o eso o aficionarse a hacer rutas ciclistas, ya os digo yo que los domingos por la mañana no hay más que hacer…  El caso es que le pilló gustillo al tema, comprensible, que todos nos hemos pasado alguna hora muerta buscando islas en el Atlántico con el google earth…
Se convirtió en un Pro del tema cartográfico, y en un trapicheo de mapitas de estuvieron es sus manos unas cartas de Paolo Dal Pozo Toscanelli, que iban dirigidas al rey de Portugal (otro loco del tema geográfico) en las que se planteaba la posibilidad de una ruta para ir a Japón, ¡pero por el otro lado! y se lo vendía en plan: “está a un tiro de piedra y con mazo de islas pa repostar en medio”, ¡un exagerado el Toscanelli! Colón, que ya había  leído unas cosillas de Aristóteles en las que decía que la tierra era redonda y tal y cual, empezó a comentarlo en las tabernas y los marineros le decían que otra cosa no ¡pero la cantidad de islas que había en el Atlántico era una cosa loca! Que muy mal se le tenía que dar la cosa pa no chocar con alguna, aún sin querer queriendo… Con toda esta información rondándole la cabeza,  empezó a trazar un plan.
Así en las horas muertas fue haciendo un mapita con una ruta: Salimos de Canarias, recto, recto, recto…  Alguna islita pa repostar y ducharnos, recto, recto, recto, ¡Japón! A ver, que no era mal método pa llegar al país nipón si no fuese porque calculó una distancia de 8.300 millas menos de la real y que en medio ¡había un continente! DETALLES
Con esto en la mano fue a junto del Rey Juan II de Portugal:
-A ver, te traigo unas ofertas que ni Ryanair, Navegación Low cost a Japón. Todo igual que hacemos ahora, pero el otro lado… Que al principio es un riesgo apostar por una ruta nueva, pero a la larga ¡lo que te ahorras!  La envidia de los reyes europeos vas a ser con ese camino tan recto y cercano para traer especies y telitas de esas de colores que gustan tanto a la realeza ¡yo no me lo pensaba que este proyecto me lo quitan de las manos!
El Rey lo consultó con un comité de expertos y para los portugueses, a los que explorar el Atlántico era lo que más les gustaba después de los fados ¡no había duda! Llamaron a Colón pa decirle que sí, que financiaban, y Cristóbal, le dijo:
-Bueno, pues vamos a prepararlo todo pa salir de Canarias.
-¿Cómo que Canarias, tío? Que eso es España, no, no, salimos de Madeira o así, pero canarias no, que después los españoles van a rallar con que la ruta es suya, si no conociese yo a Michelle Jenner Isabel la Católica.
-Ah pos… ¡desde Madeira no se ir!
Y por no calcular una ruta nueva cogió los mapas y ya fue a comentarles lo mismo a los Reyes Católicos, pero vendiéndoles a mayores que la ruta salía de Canarias y que eso era un valor añadido que flipas.
Para llegar ya con la reina predispuesta se hizo colega antes de nada de su psicólogo argentino confesor, Fray Hernando de Talavera, pa que le fuese suavizado el terreno (de penitencia, hija mía, tres padrenuestros, dos avemarías y buscas una ruta a las indias por el oeste) Y gracias a esto consiguió que después de que el consejo real rechazara su proyecto (que bastante liada tenían ya con el tema Reconquista y no estaban las arcas de Castilla pa costearse un viaje al Caribe, digo a Japón por el oeste) la reina Isabel accediera a concederle personalmente una audiencia para escuchar sus planes.
Isabel tomó notas y le planteó el tema a un comité de sabios, en Salamanca, que no era ella mujer de opinar sobre lo que no sabía, y los sabios, que por algo lo eran, cuando vieron que Colón estimaba la circunferencia de la tierra en 30.000 Km se descojonaron vivos. Que ya Eratóstenes en el año de la pera (ma o menos 250 a.de c.) la había calculado en más de 35.000…  y le dijeron a Isabel, que ni de coña, que ese proyecto no era fiable, que luego le iba a pasar lo que a Ryanair de no que no le llega el combustible y venga en las noticias todo el tiempo…
Colón, mientras esperaba respuesta real, se dedicaba a vender enciclopedias para ganarse la vida y a liarse con la Bea,  una titi cordobesa con la que tuvo un hijo y todo,  y a irle proponiendo su proyecto a todo cuanto duque e con pasta se le cruzaba (El duque de Medina sidonia, el duque de Medinaceli…) Hasta que Isabel la católica le llamó otra vez:
-A ver, Cristóbal, que a mi tu proyecto me mola, pero tengo mil cosas en la cabeza, que si expulsar a los judíos, que si acabar la reconquista de una vez por todas (peor que los líosh europeosh de Rajoy, con eso te lo digo to)… ¡una liada! No te quiero aburrir con el tema, pero hay una serie en TVE si estás interesado. Si eso, cuando ya termine, vente por el campamento de Santa Fe, en Granada y lo vemos otra vez más relajaditos.
Y así fue, en diciembre del 1491 volvieron a hablar el tema, el comité de sabios volvió a decir que era una ida de olla y además cara de cuidado… pero a Fernando el católico empezó a molarle el rollo también así que hubo acuerdo: Los reyes financiaron el proyecto de Colón, y además le dieron el título de Don, que eso mola mucho, y  si acaso descubría o conquistaba alguna finquita pues le correspondería el título de Almirante y virrey de las mismas, pero pagando, eso sí, los impuestos a la corona de castilla.
Y con esto Colón, ahora ya DON Cristóbal Colón, cogió sus bártulos y piró pal puerto de Palos, donde quedaron de darle los barquitos y las provisiones que había pedido…
Fin de la 1ª parte
 ¿Qué le pasará a partir de ahora a nuestro héroe? ¿Llegaría a Japón más rápido? ¿Se hundirán  sus carabelas tras chocar con un iceberg? Para saber más esperad a la siguiente entrada... Y los que lo sepáis, por favor, no hagáis spoilers en los comentarios ¡que esto a lo mejor lo lee Sergio Ramos!
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martes, 10 de septiembre de 2013

SIGMUND FREUD

                                                       

Se llama Freud, pero se pronuncia Froiz, como los supermercados. Es el padre del psicoanálisis, de la terapia del habla. A él le debemos agradecer el hecho de que tu novia lo quiera arreglar todo hablando, de que tus amigas te den la lata durante horas al teléfono hablándote de su ex (bueno, eso también es un poco culpa de Bell) y de que los hombres de los que nos enamoramos nos aburran soberanamente con sus traumas de la infancia. Con él empezó la modernidad, el vamos a hablar durante horas…¡¡Joder, Sigmund, menuda has liado!! ¡¡Que a ti, al menos, te pagaban, majo!!
A ver, que lo de hablar es lo de menos, que Sigmund era un hombre y él, como cualquier hombre, pensaba en lo que pensaba, concretamente en sexo. Siempre. A todas horas. Desde que tenía uso de razón. Sexo. Y cuando le decían eso de: pues cuando estés salido imagínate a tu madre, Sigmund no se andaba con rodeos: Andaaa, a mi madre, a esa si le tengo yo ganas desde hace tiempo…
Pero empecemos por el principio, Sigmund nace en la República Checa un 6 de Mayo de 1856, hijo de un comerciante de lanas y hermano mayor de cinco hermanas, cuando tiene 5 años ve desnuda a su madre y jamás logra superar el trauma, si a esto le unimos el vivir aguantando los síndromes premenstruales de 6 mujeres, el resultado no podía ser otro. Le hubiera podido pasar a cualquiera.
Estudia medicina en la Universidad de Viena y al terminar se queda con una beca de I+D ( ¡Ay! el siglo XIX, ahí si que se invertía en investigación.¡¡Que inventacos!!) Ahí, en sus años locos de estudiante (Todos hemos visto American Pie) descubre la cocaína y se hace firme defensor de esa droga tan cool. Escribe un montón de artículos ensalzando sus propiedades e incluso experimenta un poquito con un amigo suyo, Ernest Jones, que era adicto a la morfina:
-Nes, en serio, ¿morfina? ¡Que atraso, chaval! Te voy a dejar aquí lo más IN en drogas, recién salido de la Uni, esto te va a curar todos los males, te va a poner como una moto y te hará un hombre nuevo en dos días.
Lo que no tuvo en cuenta Freud fueron los efectos adictivos y secundarios, así que el pobre Ernesto sumó una adicción más a su lista y acabó muriendo por esto. (Aquí es donde hacemos el inciso de que la droga mata, niños. Droga, caca. No intentéis nunca esnifar ni inyectaros nada en casa sin la supervisión de un adulto)
Con el susto del empeoramiento de su amigo toxicómano y eso, Freud decide cambiar de vida y hacerse un hombre de provecho. En 1886 se casa con Martha Bernays y abre una clínica privada especializada en desordenes nerviosos. Empieza a tratar trastornos de histeria (asociada hasta entonces con el noble hecho de tener útero) y la neurosis, con métodos tan fiables como la hipnosis o la asociación de palabras. Pa mear y no echar gota, Sigmund. ¡¡Tocate los huevos, Mariloli!! Que conseguir ser respetado con semejantes chorradas merece que se quiten el sombrero. Al ver que  el chiringuito iba viento en popa, ya se creció y compró un sofá, así rollo diván, para ver si los pacientes poniéndose cómodos empezaban a largar, lo que comúnmente se conoce como “el efecto peluquería”. Que así, no hacía falta ni sonsacarles, ni atenderles, ya se curaban ellos sólitos. Que mientras los pacientes estaban ahí con sus ralladuras mentales, sush líosh europeos (aquí ) y sus cosas, Freud pintaba monigotes y hacía sudokus nivel avanzado.

En 1899 escribe La interpretación de los sueños,en donde hace un análisis profundo y exhaustivo de los sueños de sus pacientes, intentado llegar a las conclusiones más lógicas posibles:
-He soñado con un peine...
-Falta de pene.
-En mis sueños me atacan caballos...
-Aham... falta de pene.
-Tengo pesadillas con ratas...
-Mmmmm ...déjame pensar... Falta de pene.
-Pero si soy un hombre, soy heterosexual, y me voy a casar pal mes con mi novia...
-¡¡Me da igual!! Fal-ta-de-PE-NE
Esto a Freud le va de maravilla, que se ve que en el siglo XIX había una falta de pene loca. Así que le empiezan a llover los reconocimientos y los premios. Sigmund flipó mucho, porque es pa flipar, y se pone más contento que unas pascuas:
-¡¡Toma, toma!!¡¡Flipa, flipa!! La liada padre, anda que si os gusta esto tengo unas teorías sobre la infancia que os van a dejar a todos locos.
Y ahí ya deja volar la imaginación con la fase oral, la fase anal, la fase fálica, con el complejo de Edipo, con la envidia del pene que desarrollan las niñas cuando se enteran de que no tienen colita...

En fin, unas teorías apasionantes que es mejor que os las explique Freud en persona porque a mi me da la risa... Se sigue creciendo con el ello, el yo, y el superyo, con la líbido y las pulsiones ...(En serio, no os voy a explicar nada de esto, abrid ahí una ventanita con el google, ¡¡hacedme el favor!!)
En 1938 empezó a tener problemas con la Gestapo, porque él era un poquitín judío, y quemaron todos sus libros públicamente. Le hicieron mazo mobbing y al final se acabó marchando del país, pero antes tuvo que firmar un papelucho, de esos como los que te hacen firmar los médicos en las operaciones para curarse en salud, asegurando que el régimen nazi lo había tratado con mucho respeto. Freud lo firmó sin problemas y hasta les dejó una dedicatoria y todo: Recomiendo calurosamente la Gestapo a cualquiera.
Se fue a Londres y se dedicó a dar charlas sobre penes y niños salidos y de histéricas y de falta de sexo, de ahí el mito de la mal follada (Esto me lo estoy inventando yo, pero creo que es verdad). Sus últimos años estuvo muy malito porque tenía cáncer en el paladar (sus papás seguro que le habían lavado muchas veces la boca con lejía por decir tantas barbaridades) y al final, y después de 33 operaciones que le produjeron diversas dificultades en el habla, acabó pidiendo al médico que acabara con su sufrimiento. Murió el 23 de septiembre de 1939 después de que le administraran 3 inyecciones de morfina.

Por último me gustaría destacar ciertas curiosidades de este genio (o de este loco, ¡¡siempre es tan fina la linea!!). Le tenía fobia a los helechos y al número 62, sólo tenía tres trajes, tres mudas de ropa interior y tres pares de zapatos, aprendió el castellano él sólito en su época de estudiante para poder leer a Cervantes en su lengua original y, sobre todo, era un cachondo metal que te cagas. Después de pasarse la vida hablando de sexo era capaz de sorprenderte con golpes de efecto como : Señores, a veces, un cigarro es sólo un cigarro. O cosas como: La gran pregunta que todavía no he podido responder a pesar de mis treinta años de investigación femenina es ¿que quiere una mujer?. Y yo me pregunto: Simón, después de todo lo leído, ¿en serio hace falta que contestemos? Pues lo que quiere todo el mundo. ¡¡ UN PALOOOOOO!!