GERÓNIMO

Hoy vamos a destapar aquí en el blog una gran mentira de la CIA, que cuando fue la movida de la captura de Bin Laden y eso dijeron: “Tenemos a Gerónimo” bueno, lo dijeron en inglés que mola más y es más pofesional:  "Geronimo Enemy Killed in Action"

¡MENTIIIIIIIIIIIIRA!

Que ellos no mataron a Gerónimo ¡ni lo tenían ni na! ¡Qué Gerónimo se había muerto en el 1909, hombre ya!  Aportemos luz sobre el caso y contemos quien era este abuelete tan majo de la imagen...

Gerónimo era un Apache Chiricahua, cuyo nombre real era Goyaalè, “el que bosteza” ¡si es que los padres indios no tenían ningún respeto ni consideración a la hora de bautizar a la prole, que esto fijo que granjeó unos vaciles guapos! Lo que pasa es que el hombre blanco pronunciaba de pena el idioma apache, que nunca sabían donde acentuar ni ná entonces para simplificar le empezaron a llamar Gerónimo. (He aquí la gran aportación española al nuevo continente, que lo de nacionalizar los nombres lo hacemos de puta madre)

 Pues nuestro héroe nació en 1823 en la Apachería, los territorios de la actual Arizona, Chihuahua o por ahí  y recibió formación bajo el mando del Gran Jefe Mangas Coloradas, con el que aprendió todas las cosicas de Indios: Gritar A-a-a-a-a-a-a-a colocando intermitente y acompasadamente la mano en la boca, el tiro con arco, hablar solo con infinitivos, arrancar cabelleras… ¡lo típico!

Con 17 años se casó con una joven Chiricahua, se hizo un hombre y empezó a ir a guerra, porque a Gerónimo le tocó vivir en una época mazo de convulsa que tenían la ostia de movidas con los Estadounidenses y los Mexicanos para ver quién se hacía con el control de la Apachería, esa zona tan idónea para el cultivo de Cactus y la crianza de serpientes del desierto, ya ves tú...

A los guerreros apaches lo de matar al enemigo se la traía un poco al pairo, lo que realmente daba caché y te convertía el puto amo de la tribu era robar ganado y caballos ¡unos ladronzuelos estos Chiricahuas! Y no creais que robaban dos o tres vacas, no, no, en una ocasión les birlaron a los mexicanos la friolera de1200 reses y estaban en plena huida cuando se dieron cuenta de que los seguían, entonces Mangas Coloradas decidió poner en práctica la típica táctica esta que sale en todas las películas: fingir que huyes mientras unos cuantos se quedan rezagados, rodean al enemigo y lo cuecen a flechazos. La conocéis todos, ¿verdad? Pues se ve que los mexicanos no debían ir mucho al cine y cayeron como moscas… ¡una masacre que flipas! Que a los indios para no molarles matar a los enemigo ¡cuando se ponían no tenían medida! Los mexicanos se lo tomaron como algo personal, ¡un cabreo! Y a grandes males, grandes remedios:

-¿Con que esas tenemos, wey? ¡¡Pues ahora os vais a quedar una temporadita sin follar!!!

Y esperaron a que los guerreros saliesen a otra escaramuza, que por aquella época había más batallas que enfrentamientos Madrid-Barça esta primavera, para entrar en el poblado y matar a las mujeres y niños. Y aquí es cuando Gerónimo se pica y empieza  su leyenda, que cuando vuelve y se encuentra el percal le entra un ira, una rabia y un nosequé que jura odio eterno a los mexicanos. Que él estaba mazo de enamorado y esa era la mujer de su vida, y no la iba a olvidar nunca, y eso no se hacía, ¡jope! Que luego superó el trauma, se casó otras 9 veces y perdió la cuenta de los hijos que tuvo, pero el odio ya se le quedó dentro….

Esa noche tuvo un sueño (I have a dreeeeaaam!) en el que una voz le decía: ”No dudes en lanzarte al ataque, quitaré la pólvora de la balas mexicanas y guiaré tus flechas. Eres invulnerable” y si algo caracteriza a los héroes es que tienen fe ciega en los sueños, pueden dudar de Matías Prats, pero jamás de los jamases de la voz en off de los sueños!

Después de esto se vino arriba y se iba de máquina en los enfrentamientos con el hombre blanco  ¡El tigre humano le llamaban! Y un no parar de tener revelaciones de los dioses. Cuentan que una noche estaba con los demás guerreros en torno al fuego, pone los ojos en blanco y dice:

-Mi tener una visión. Mujeres y niños de apaches ser masacrados en campamento por hombre blanco…

Y claro, con el rollo de hablar en infinitivo no sabían si ya habían sido o iban a ser así que por las dudas cogieron los caballos y cuando llegaron al poblado se encontraron con el triste percal. Ahí quedó claro que Gerónimo tenía un Don, pero también digo una cosa… ¡vaya mierda de Don! Que ya podía tener las visiones cuando aún se puede solucionar el tema.

Pero bueno ya estaba liada: el hombre blanco atacaba los poblados, los apaches atacaban las ciudades, vamos que por esas décadas la peña vivía con el corazón en un puño, ¡que estaban del jueguecito de Indios y Vaqueros hasta el moño!  Pero estaba visto que los Apaches llevaban las de perder que eran minoría y no se daban reproducido para mantener la población, así que cuando su número disminuyó considerablemente los Americanos decidieron meterlos en Reservas, que una cosas es que quisieran su tierra y otra que quisieran la extinción completa, que esos colores y esos cánticos eran la mas de vistosos y sería una pena perderos…. Por esa época Gerónimo ya era el jefe de su banda, y lo de estar en una reserva condenado a plantar sandías y cosas por el estilo era un muermo, pero ya la gota que colmó el vaso fue cuando le prohibieron las borracheras con licor de maíz.

-¡Esto ser un sindiós!

Reunió a un grupo numeroso y se largó. Lo persiguieron unos meses y se rindió. Y se largó otra vez. Y lo persiguieron unos meses y se rindió. Y se largó otra vez. Y lo siguieron unos meses y se rindió. Y se largó otra vez. Y lo  siguieron unos meses y se rindió. ¡Y acabó hasta las pelotitas de tanta fuga! Que además en la última persecución se había movilizado la leche de hombres del ejército americano y Gerónimo intuía como se las gastaban los yankees, así que y decidió someterse a los dictados del capitalismo, de la moda y la sociedad de consumo, se puso un penacho de plumas, cuando los apaches chiricahuas nunca había puesto esa mariconadas ¡y se hizo hasta cristiano!  Montó su propio chiringuito en la reserva de Oklahoma a la que le habían transladado para estafar a los guiris con mogollón de Merchandaisin: vendía autógrafos, flechas con su nombre, ¡los auténticos y originales botones de su guerrera! (cuando los terminaba se cosía otros y volvía a vender ¡los auténticos y originales botones de su guerrera!) Tan bien se le dio el Show Busines que en 1906 un profesor de Arizona le pidió permiso para escribir su biografía autorizada y él:

-¡Tu sentarte y yo contar!

Y contó su propia versión de la historia, ¡¡un best seller de la época!!

Lo que pasa es que ya se sabe lo que le pasa a la peña que se mete en el mundo de la farándula: la noche les confunde… y a Gerónimo siempre le había perdido el licor de maíz y una noche se calló del caballo a una zanja y cogió una pneumonía de esas que ya no te sacas de encima…

-¡Gran jefe! ¡Qué vergüenza! ¡¡¡A su edad!!!- Porque a todo esto ¡como pasa el tiempo! El bueno de Gerónimo tenía 83 años …

-¡¡Yo ir superbién y supercosnciente!!- se defendía.

Pero en plena fase de exaltación de la amistad empezó a enumerar a todos y cada uno de los guerreros que habían luchado y caído a su lado, como luego emularía Ismael Beiro en GH1, y abandonó el show…